Reseña: Los jardines de la Luna, de Steven Erikson

Los jardines de la Luna (Malaz: El libro de los caídos - I), de Steven Erikson

Editorial: NOVA
Traductor: Miguel Antón Rodríguez

Fecha de publicación: mayo de 2019 (4ª ed.)
Formato: tapa dura con sobrecubierta

ISBN: 9788466660877

Páginas: 776

Precio: 25,00 €

Tras guerras interminables y amargas luchas internas, el descontento se ha apoderado del Imperio de Malaz. Incluso las tropas imperiales, siempre ansiosas por derramar sangre, necesitan un respiro. Sin embargo, las pretensiones expansionistas de la emperatriz Laseen no tienen límites, más aun cuando son reforzadas por sus temibles agentes de la Garra.

El sargento Whiskeyjack y su escuadrón necesitan tiempo para llorar los muertos del último asedio, pero Darujhistan, la última de las Ciudades Libres de Genabackis, los espera; en ella ha puesto la emperatriz su mirada depredadora.

El Imperio no está solo en este juego. Las fuerzas siniestras conspiran dentro y fuera de las sendas mágicas, y entretanto, hasta los dioses se preparan para la batalla...

VALORACIÓN: 4,5/5

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Hacía mucho tiempo que tenía ganas de comenzar con esta saga, pero nunca tenía la oportunidad. Los jardines de la Luna es el primer libro de una saga de fantasía épica compuesto por diez tomos. Ya en la nota del autor se nos dice que este libro comienza en mitad de una maratón, por lo que te sumas corriendo o te vas de la carrera. O amas la historia de Erikson, o la odias. Pero no desesperéis, pues aunque al principio cuesta entender lo que ocurre, quiénes son los personajes, quiénes son los héroes y los villanos, todo cobrará sentido y es una historia que merece la pena, muchísimo.

Como dije, este libro comienza in media res directamente en mitad de la acción, sin introducciones ni nada. En el prólogo podemos ver algo sobre lo que anda aconteciendo en el imperio de Malaz y sobre el gobierno de la nueva emperatriz, pero tampoco lo deja todo muy claro. Erikson hace que el lector tenga que trabajar con sus propias teorías y descubrir la trama poco a poco, por lo que contar demasiado sería spoilearos.

Nos encontramos con el Imperio de Malaz viviendo una sucesión de guerras, las cuales van provocando a su vez distintas rebeliones internas. El Imperio se halla en un aire bélico y con una moral muy minada. La emperatriz Laseen es ahora la nueva gobernante, tras haber derrotado al anterior monarca. Ella tiene unos fuertes deseos expansionistas, que van a ir fomentando aún más las guerras. A partir de aquí, vamos a tener el punto de vista de distintos personajes distintos que son, en cierta medida, manipulados por los dioses para conseguir sus objetivos. Por otro lado, las Ciudades Libres de Genabackis ven peligrar sus libertades y son acechadas por el Imperio. Es una trama llena de traiciones, enfrentamientos, muertes y magia.

Este primer tomo está compuesto por siete libros, los cuales están protagonizados por una serie de personajes que en algún punto convergen juntos. En este primer número vamos a encontrar un elenco bastante grande de personajes, muy variopintos además. Algunos de ellos son ancestrales, con miles de años de vida. Gracias a estos vamos a conocer cómo funciona la magia y sus fuentes, las distintas sendas. No podríamos decir que hay un único personaje, sino que son varios. Lo malo es que algunos de estos personajes son planos y no consiguen conectar con el lector, al menos con este primer tomo, sin embargo otros sí.

Uno de los puntos más fuertes de este libro es la ambientación. Tengo que decir que la ambientación del universo construido por Erikson es espectacular. Esto se debe a que el propio autor ha estudiado arqueología y antropología y toma distintos elementos de nuestras civilizaciones pasadas para adaptarlas a su mundo. Es un universo muy bien construido, pero que muy bien hecho, casi con una vida propia de miles de años de antigüedad. Es un mundo que rebosa magia, esta a través de las sendas, pero que no se explica todo (quizás en otros libros sí). El autor ha creado, además, una serie de razas muy bien caracterizadas y una mitología, con sus dioses y demás, muy consistente. Son unos dioses reales, que intervienen en la historia del mundo, siempre que les convenga.

La prosa de Erikson también es inmejorable. Es una narración interesante, que atrapa al lector, aunque no entienda realmente lo que esté pasando, pero que engancha de una manera brutal. Las continuas descripciones que hace a lo largo del libro, ya sean de lugares o de personajes, son las justas y necesarias, no se explaya en párrafos de descripciones, y eso se agradece. No son ni densas ni tampoco rompen la acción en ningún momento. El ritmo del libro es bastante fluido, aunque sea un libro bastante voluminoso. Se nota que Erikson sabe manejar perfectamente los tiempos en la narración, aunque el final es muy abrupto.

Por último, la edición es de tapa dura, con sobrecubierta, con una portada muy llamativa y bonita. Nada más abrir el libro encontramos un plano de Darujhistan. Tras la nota del autor, tendremos  un mapa de Genabackis y un dramatis personae con todos los personajes de la historia divididos por facciones. Después, aparece el prólogo con los libros. Cada capítulo comienza con un poemario de uno de los libros antiguos del universo de Malaz, algo que me ha gustado. Por último, termina con un glosario de títulos y grupos, razas, ascendientes, sendas, etc. Todo esto para que el lector no se pierda en su lectura.

En conclusión, se trata de la primera parte de una saga de fantasía épica medieval llena de magia, traiciones, muertes y batallas. Aunque al principio es una lectura enrevesada que comienza in media res, poco a poco el lector se va a ir adaptando. Un libro con una ambientación muy bien construida, un mundo perfectamente vivo y real con unos personajes bien construidos y una narración fluida. Lector, no desesperes y sigue adentrándote en el Imperio de Malaz.