Reseña: Amanece en Belchite, de Jaime García Simón

Amanece en Belchite, de Jaime García Simón

Editorial: Editorial Círculo Rojo

Formato: Tapa blanda

ISBN: 978-84-9183-089-4

Páginas: 404

Precio: 15,20 €

Miriam vive en Belchite, un pueblo aragonés de escalofriante pasado. Con 14 años comienzan a sucederle extraños fenómenos que trastocan los pilares de su misma cordura, en mitad de una familia que parece cada vez más fragmentada.

Aterrorizada, trata de buscar explicación a sus problemas en unos viejos diarios de Macarena, su madre, que encuentra en el trastero de casa. Los sorprendentes relatos que narra Macarena en primera persona, muchos años antes, resultan ser muy parecidos a los que ella viene sufriendo, por lo que intuye que pueden tener alguna interconexión, como finalmente descubre.

La colosal historia que halla en esos escritos y su consecuencia intrínseca, son de tal magnitud, que jamás podría ni tan siquiera haberlo imaginado. Poco a poco, el misterioso puzle en el que se han convertido sus vidas, parece por fn encajar y comienza a darse cuenta de su situación real…

VALORACIÓN: 4/5

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Miriam es una adolescente de 14 años que vive con su madre, su hermana chica y su abuelo en Belchite. Su padre les ha abandonado y su madre, con depresión por este motivo, no ayuda a que Miriam tenga una vida feliz. Un día en su casa comienzan a oírse sonidos extraños. Poco a poco esos fenómenos paranormales van a ir creciendo, añadiéndose sombras que aparecen y desaparecen y objetos que se mueven solos. Cada día Miriam tiene más miedo y pide ayuda a una vecina. La situación no mejora y la joven encuentra unos diarios de su madre. Desde aquí, todo va a ir cobrando más sentido.

Podemos decir que hay dos protagonistas. Por una parte, Miriam, pero me ha faltado saber más de ella y llegar a empatizar. Por el otro, Macarena, la madre. A esta la vamos a conocer muy bien a través de sus diarios, lo que sentía, lo que hacía. Es el personaje mejor logrado de toda la novela. La ambientación está muy bien conseguida. El autor ha creado una atmósfera de intrigas y de miedo al lector. Esa atmósfera muy al estilo de las películas de los Warren.

El ritmo es algo lento al principio pero hacia la mitad de la historia, este va cogiendo mucho ritmo y fluidez. Además, pese a que es muy extenso, se leer súper rápido. Al mismo tiempo, la novela está llena de giros donde no todo es lo que parece a simple vista y tiene un final muy sorprendente. Sobre la narración, con una prosa muy bien escrita, comenzamos a verlo todo desde el punto de vista de Miriam, pero cuando esta encuentra los diarios de su madre, Macarena, la narración se enfoca desde el punto de vista de esta última y nos metemos en una lectura sobrenatural.